
El ala cerrada de San Francisco George Kittle ha asegurado oficialmente su futuro con los 49ers tras acordar una ampliación de contrato de cuatro años y 76,4 millones de dólares que consolida su legado en rojo y dorado. El acuerdo convierte a Kittle en el ala cerrada mejor pagado de la historia de la NFL.
Detalles del contrato de George Kittle
Este contrato no es sólo para recompensar el rendimiento pasado. Se trata de redoblar la apuesta por un jugador que sigue redefiniendo su posición. Kittle no sólo es una de las principales amenazas receptoras, con más de 7.300 yardas en su carrera. También es uno de los mejores bloqueadores de la liga.
Su salario medio anual será de 19,1 millones de dólares, superando por poco a Trey McBride, de Arizona. Es una gran declaración de intenciones de los 49ers. Ahora, se aseguran de que una de sus mayores estrellas siga siendo una piedra angular de su ofensiva hasta 2029.
¿Cómo afectará a la ofensiva de los 49ers?
Su presencia es esencial para la ofensiva de San Francisco, que se basa en la versatilidad y el físico. En un año en el que los 49ers han dejado marchar a varios veteranos, mantener a Kittle ofrece una estabilidad y un liderazgo muy necesarios.
¿Qué pasará con Brock Purdy?
Mientras que la extensión de George Kittle asegura una pieza clave de la ofensiva de los 49ers, la atención se centra ahora en el mariscal de campo Brock Purdy. Tras un comienzo fulgurante de su carrera, se espera que Purdy sea el siguiente en la lista de candidatos a una ampliación de contrato importante en el Levi’s Stadium.
Con el nuevo acuerdo de Kittle ayudando a aliviar las preocupaciones sobre el tope salarial, San Francisco se está posicionando para hacer una inversión a largo plazo en su joven mariscal de campo. Asegurar tanto a Kittle como a Purdy solidificaría el núcleo ofensivo. Además, mantendrá a los 49ers en la lucha por el campeonato en los próximos años.
Con seis nominaciones al Pro Bowl y dos selecciones All-Pro, Kittle ya es uno de los jugadores más condecorados en la historia de los 49ers. Ahora, con esta extensión, está a punto de convertirse en el primer ala cerrada en la historia de la franquicia en superar una década con la camiseta roja y dorada.